La enfermedad arterial periférica (EAP) se caracteriza por el desarrollo de placas arterioscleróticas obstructivas en las arterias de los miembros, generalmente de las piernas. Conforme esas placas crecen, reducen el flujo sanguíneo a los tejidos distales a la obstrucción; así, el porcentaje de estenosis de la arteria y la velocidad del flujo a nivel de la lesión, determinan el grado de anormalidad hemodinámica en la extremidad distal. El flujo sanguíneo reducido (isquemia) a los músculos se acompaña por sensación de dolor muscular local, incrementándose al aumentar el consumo de oxígeno (VO2), como ocurre al realizar ejercicio. El dolor es un síntoma de la EAP, y se denomina claudicación intermitente (CI).

Programas de entrenamiento en pacientes con PAD

Se ha demostrado en distintos estudios que la participación en programas de ejercicio mejora significativamente la capacidad funcional en estos pacientes.

Frecuencia de entrenamiento

Los resultados anteriores sugieren que 3 días/semana representa la frecuencia óptima de entrenamiento para pacientes con EAP.

Duración de las sesiones de entrenamiento

Los protocolos que utilizan una duración de la sesiones entre 30 y 60 min, son los más adecuados en la mejora de la capacidad funcional en estos pacientes.

Relación trabajo-descanso

En la mayoría de los protocolos de entrenamiento propuestos para pacientes con EAP, se asume que se realiza un entrenamiento intermitente donde los pacientes andan hasta claudicación, paran para descansar, y una vez que el dolor desaparece reanudan la actividad. Sin embargo, la duración del ejercicio y los periodos de descanso no son controlados en la mayoría de los casos. Sin embargo, se sabe que la modificación de la relación trabajo-descanso puede ser una de las más importantes variables en la prescripción de ejercicio en pacientes con EAP.

Duración total del programa

Los datos de los estudios publicados sugieren que las mejoras en la capacidad de caminar alcanzan su pico máximo entre las 12 y las 24 semanas de entrenamiento.

Volumen de entrenamiento

El volumen de entrenamiento puede ser calculado utilizando la siguiente ecuación:

Volumen de entrenamiento = frecuencia (días/semana) x frecuencia de sesiones (sesiones/día) x duración de sesiones (minutos/sesión) x duración total (en semanas).

Los resultados sugieren que más allá de los 2000 minutos de entrenamiento, la capacidad de mejora de caminar sin dolor o valor total de caminar tiende a disminuir.

Intensidad de entrenamiento

Prácticamente todos los estudios utilizan el umbral de dolor para prescribir la intensidad de ejercicio a realizar, por lo que no hay prácticamente datos sobre otros marcadores de intensidad de ejercicio (frecuencia cardiaca, VO2, lactato), y es difícil comparar resultados y determinar la efectividad de las diferentes intensidades de entrenamiento. Dada la subjetividad de la tolerancia al dolor, quizás la medida de la frecuencia cardiaca, VO2, VCO2 y otros componentes asociados al dolor muscular (K+, H+ y lactato plasmáticos) podrían ayudar en la prescripción de la intensidad de ejercicio en el futuro.